¿Qué nos dice realmente el número en la balanza?
La balanza es una herramienta que muchas personas usan para controlar su peso corporal. Sin embargo, ese número que vemos no siempre refleja nuestra salud o nuestra composición corporal. Puede indicar si hay un déficit, normopeso o exceso de peso, pero no cuenta toda la historia de lo que pasa en nuestro cuerpo.
El mito del peso ideal
Muchas personas viven pendientes del número que muestra la balanza. Usan ese valor como guía para decidir si deben comer más o menos o entrenar más o menos. Pero esta visión está incompleta. La balanza no diferencia entre grasa, músculo, hueso o agua. Solo muestra un total.
Pensar que el peso es sinónimo de salud puede llevar a estrategias equivocadas como el exceso de ejercicio o dietas restrictivas que deterioran la salud.
Imagen corporal y salud
La imagen que queremos proyectar muchas veces está influenciada por los estándares sociales, no por lo que realmente significa estar saludable. A veces, buscamos adelgazar simplemente para encajar con una imagen, sin tener en cuenta si esa pérdida de peso proviene de una disminución de grasa o de músculo.
Perder masa muscular y aumentar grasa corporal es un escenario negativo, aunque el peso en la balanza haya bajado. Esto puede hacernos más vulnerables a enfermedades metabólicas, a pesar de vernos “más delgados”.
En cambio, una persona que a simple vista parece tener sobrepeso puede estar en mucho mejor estado de salud si su masa muscular es alta y su porcentaje de grasa es bajo.
Entrenamiento, alimentación y composición corporal
Cuando comenzamos a entrenar y a comer mejor, es común que el número en la balanza suba. Pero si ese aumento se debe al incremento de masa muscular, ¡vamos por buen camino!
Con el tiempo y una estrategia sostenida de entrenamiento de fuerza, alimentación adecuada y descanso, es probable que logremos recomposición corporal: más músculo, menos grasa, y mejor salud.
Veamos los distintos escenarios:
Cuando sube el peso corporal:
- Aumenta el músculo y se mantiene o baja la grasa → ¡Excelente!
- Aumenta la grasa y se mantiene o baja el músculo → Alerta, estamos empeorando.
Cuando baja el peso corporal:
- Disminuye la grasa y se mantiene el músculo → ¡Muy bien!
- Disminuye el músculo y aumenta la grasa → Riesgoso para la salud.
En principiantes: puede darse la situación ideal de aumentar músculo y disminuir grasa al mismo tiempo.
¿Y los controles nutricionales?
Muchos nutricionistas se guían únicamente por la balanza sin medir composición corporal. Esto puede llevar a interpretaciones erróneas: ¿realmente bajaste grasa o fue músculo?
Por eso, lo más importante no es solo el peso, sino qué está compuesto ese peso.
Conclusión: tu salud va más allá del peso
– Consultá con un entrenador o profesora de educación física que entienda de recomposición corporal
– Buscá un nutricionista deportivo que realice mediciones de grasa y músculo
– Recordá: el peso corporal es solo un dato más
– Ganar músculo siempre te va a acercar más a la salud, la vitalidad y la estética que buscás
– Entrená, comé bien, descansá y bajá el estrés.